Ya es oficial: la US Navy tiene un nuevo misil contra buques

La Armada de Estados Unidos ha seleccionado el misil noruego Naval Strike Missile como su nuevo misil anti-buque de alcance más allá del horizonte, para dotar al Littoral Combat Ship y, probablemente también, a la futura fragata.

Se esperaba que el NSM, una propuesta conjunta de Kongsberg y Raytheon, ganara el concurso, después de que sus principales competidores, el Harpoon de largo alcance de Boeing y el Long-Range Anti-Ship Missile de Lockheed Martin, se retiraran de la competición. Ambas compañías sintieron que el concurso estaba sesgado hacia la oferta de Raytheon/ Kongsberg, informó Defense News en mayo pasado.

La introducción del NSM en la flota rompe el dominio de décadas del venerable Harpoon como misil de ataque de superficie más allá del horizonte, y supone un gran impulso para las ambiciones de Kongsberg en el mercado estadounidense.

El contrato inicial se estima en unos 14,86 millones de dólares, pero podría aumentar hasta 848 millones de dólares durante la vigencia del contrato.

Posiciona al NSM en el mercado de misiles superficie-superficie para los próximos años, dijo Oeyvind Kolset del equipo de sistemas de misiles de Kongsberg. Muchos de los misiles anti-buque del mundo están llegando al final de su vida útil, por lo que la selección del NSM por parte de la Marina de EE.UU. es un buen presagio para futuras ventas, dijo Kolset.

También es una gran victoria para la industria de defensa europea, que está viendo un creciente interés por parte de la Armada de EE.UU., a medida que compite para llenar sus vacíos de capacidades frente a la competición de Rusia y China.

El misil tiene un alcance de más de 100 millas náuticas, con capacidad de reconocimiento de objetivos, que limita la necesidad de que otro barco o aeronave monitorice al blanco.

En enero, el Contraalmirante Ronald Boxall, Director de Guerra de Superficie pronosticó que el concurso terminaría para el verano y que el próximo paso consistirá en apuntar a mayores distancias.

La Marina está considerando una combinación de aviones tripulados, aviones no tripulados y submarinos como posible combinación para colaborar con la Flota de superficie para mantener a los adversarios a distancias cada vez mayores.

Fte. Defense News