Snibot, el primer robot francotirador del mundo es francés

A la sombra de Estados Unidos, China y Rusia, Francia avanza sus peones en la guerra del futuro. En la última edición de Eurosatory, que tuvo lugar en París del 11 al 15 de junio, la industria francesa presentó la primera maqueta de un nuevo tipo de francotirador robótico. Llamado Snibot, está equipado con una cámara y un mando a distancia humano. Pero a diferencia de los actuales drones terrestres, que utilizan el llamado disparo de neutralización por ráfagas, el Snibot está especializado en la hiperprecisión, una tecnología que garantiza un éxito del 100% con el disparo único o doble a largo alcance.

«La hiperprecisión ofrece la certeza de disparar hasta 200 o 300 metros con un grado de precisión que no puede alcanzar a un tirador y la seguridad de que el siguiente disparo irá al mismo lugar», dijo a RTL Futur el General del Ejército Michel Yakovleff, portavoz de SD4E, que desarrolla el dron terrestre.

La hiperprecisión tiene varias ventajas. Capaz de evitar áreas vitales como objetivos, el Snibot puede neutralizar sin matar. «El arma está acoplada a un sistema de observación optrónica día-noche y a un algoritmo, programado para no disparar cuando el punto al que se apunta es la cabeza, el abdomen o el tronco del objetivo. Así que es seguro que dispara contra brazos o piernas a una distancia de hasta 300 metros», dice Yakovleff. Se trata de una importante ventaja ética, en un momento en que el desarrollo de la inteligencia artificial suscita temores sobre la llegada de tecnologías autónomas y letales.

El Snibot no es un robot asesino. Al igual que los drones utilizados por Francia en la franja sahelosahariana, no es capaz de elegir por sí mismo sus objetivos. «La gestión de la puntería es responsabilidad de la máquina, pero la decisión de disparar es humana», subraya Michel Yakovleff. El robot está destinado a ayudar y proteger a las fuerzas armadas en determinadas misiones peligrosas y tareas tediosas.

En las zonas urbanas podría impedir que los terroristas suicidas se detonaran a sí mismos neutralizándolos antes de que activaran su carga, al tiempo que permitiría a los soldados hacer prisioneros para obtener información. «Uno de los problemas que enfrentan nuestros ejércitos cuando son atacados, como en Afganistán o Bagram, es que los centinelas matan a los atacantes y no toman prisioneros. Como resultado, no investigamos y no rastreamos las redes», lamenta Michel Yakovleff.

Utilizado para proteger la infraestructura en teatros de operaciones extranjeros, el Snibot permitiría redirigir un número de soldados a otras misiones, al tiempo que les ahorraría el estrés y la fatiga causados por la vigilancia de un lugar. El robot también podría ser requerido para defender sitios sensibles, tales como plantas de energía nuclear, bajo el control de operadores humanos.

La compañía francesa espera profundizar en un sector con un potencial de desarrollo muy significativo. Según un estudio de WinterGreen Research publicado en 2015, el mercado mundial de robots militares terrestres podría alcanzar los 10.200 millones de dólares en 2021. El Snibot está siendo evaluado actualmente por el Ministerio de Defensa.

«Los robots armados no son la prioridad hoy en día», advierte el General Charles Beaudouin, 2º Jefe de Estado Mayor a cargo de los planes y programas del Ejército. En el marco del programa Scorpion, la primera ambición del Ejército es integrar grandes robots en sus unidades, que puedan facilitar la evacuación de los heridos, transportar equipos y explorar terrenos potencialmente minados. En un plazo de tres años se desplegarán unas 20 unidades. La puesta en marcha de robots armados podría ocurrir en una segunda ocasión, en 2030.

Después de haber perdido el tren de los UAV de vigilancia aérea, París decidió comprar aviones sin tripular Reaper en 2013, después de no haber desarrollado sus propios proyectos a pesar de un cierto know-how electrónico y aeronáutico. Francia podría perderse un nuevo avance tecnológico militar, advierten los fundadores de SD4E. Decididamente «patrióticos», estos últimos no dudarán en recurrir a la exportación si las negociaciones fracasan. Empresas estadounidenses ya han expresado su interés en su tecnología de hiperprecisión.

Fte. RTLfutur