El Pentágono prohíbe el uso de dispositivos GPS en todas las «Zonas de Operaciones»

El Departamento de Defensa ha emitido recientemente una orden que prohíbe a todo el personal, el uso de los servicios de geolocalización en sus dispositivos personales y los proporcionados por el gobierno en todas las «áreas operativas».

La política, que se aplica a teléfonos inteligentes, tabletas, rastreadores de fitness, relojes inteligentes y todas las demás aplicaciones con funciones de geolocalización, entró en vigor inmediatamente.

«El mercado en rápida evolución de dispositivos, aplicaciones y servicios con capacidades de geolocalización… presenta un riesgo significativo para el personal del Departamento de Defensa tanto en servicio como fuera de servicio, y para nuestras operaciones militares en todo el mundo», escribió el vicesecretario de Defensa Patrick Shanahan en un memorándum para la cúpula del Pentágono.

«Estas capacidades de geolocalización pueden exponer información personal, ubicaciones, rutinas y números de personal del Departamento de Defensa», dijo, lo que puede crear «consecuencias de seguridad no deseadas y un mayor riesgo para la fuerza y la misión conjuntas».

Bajo la nueva medida, los comandantes en áreas operativas pueden hacer excepciones para ciertos dispositivos suministrados por el Gobierno basados en la «necesidad de la misión». También pueden permitir el uso de servicios de geolocalización en dispositivos personales después de realizar un estudio exhaustivo de la seguridad de las operaciones.

El Pentágono define un área de operaciones como «un lugar donde los militares están operando con una misión específica», dijo a Nextgov la portavoz del Pentágono, Mayor Audricia Harris. Los puestos militares avanzados en el extranjero, como los que se utilizan en la lucha contra ISIS, caerían bajo este paraguas, dijo, pero el edificio del Pentágono no.

Aunque la orden no bloquea los servicios de geolocalización en áreas no operativas, requiere que los mandos evalúen los riesgos de esas características para el personal en servicio y fuera de servicio y emitan restricciones «racionales» cuando representan una amenaza para los empleados o las operaciones.

«El objetivo de esta política es centrarse más en las características, en lugar de en los dispositivos», dijo Harris, señalando que los servicios de geolocalización se están volviendo casi omnipresentes a medida que más productos se conectan a Internet. «Lo siguiente es que podría haber lentes de contacto con la misma capacidad, así que queremos enfocarnos en la característica y no en el medio real.»

La medida es la última de una serie adoptadas por el Pentágono contra el uso de dispositivos electrónicos en instalaciones militares.

En mayo, Shanahan emitió una prohibición general de los dispositivos móviles personales y emitidos por el Gobierno en áreas clasificadas del Pentágono, citando preocupaciones sobre posibles filtraciones de información clasificada. La prohibición no cubre los dispositivos con capacidades de almacenamiento y transmisión insignificantes, como los llaveros.

El Pentágono comenzó a reconsiderar sus políticas de electrónica móvil, después de que la aplicación de seguimiento del estado físico, Strava, recopilara datos sobre la ubicación de los usuarios en un mapa de calor global y revelara inadvertidamente la ubicación de múltiples bases militares en el extranjero. En el acopio de datos también se dieron a conocer las identidades y ubicaciones de los trabajadores humanitarios internacionales, los agentes de inteligencia y el personal militar, lo que planteó problemas de seguridad a los funcionarios gubernamentales.

«Siempre tenemos conciencia de los rápidos cambios en el entorno tecnológico, por lo que constantemente revisamos nuestras políticas, para asegurarnos de que estén actualizadas y que siguen protegiendo la integridad de nuestra misión y de nuestro personal», dijo Harris.

Fte. Nextgob