MBDA presenta en Abu Dhabi sus nuevas versiones naval y terrestre del misil Mistral

MBDA ha dado a conocer las dos nuevas versiones avanzadas de su sistema de misiles de muy corto alcance Mistral para defensa aérea.

Juan Pons.

Una de ellas es SPIMM, cuya presentación ha tenido lugar en el salón NAVDEX 2019 de Abu Dhabi, que se celebró la semana pasada de forma paralela a IDEX 2019, la gran cita mundial del sector de la defensa y seguridad de Oriente Medio y África que atrae a fabricantes de los cinco continentes, incluida la industria española.

SPIMM ‒acrónimo de Self-Protection Integrated Mistral Module‒ consiste en una torreta naval Simbad-RC operada por control remoto, equipada con dos lanzadores de misiles Mistral y dotada con un sistema infrarrojo panorámico de 360° que asegura la detección y el seguimiento de amenazas navales y aéreas, especialmente aviones pilotados remotamente o RPAS, lanchas rápidas y aviones o helicópteros de combate

La torreta SPIMM está concebida para ser montada directamente y sin necesidad de obras mayores sobre la cubierta de cualquier tipo de barco, principalmente de aquellos que requieren ser dotados de un sistema de combate para autodefensa, como es el caso de buques auxiliares, logísticos o transportes ligeros.

La compañía europea también ha presentado el sistema Atlas-RC/LIC²ORNE, una nueva versión terrestre montada sobre vehículo blindados ligeros y concebida para proteger de ataques aéreos y acciones terroristas a destacamentos móviles y unidades de vanguardia.

Consta de una torreta automatizada Atlas-RC armada con un lanzador doble de misiles Mistral, cuya clave está en haber integrado la unidad de mando y control LIC²ORNE. Se trata de una variante del sistema antiaéreo VL MICA con capacidad para coordinar hasta ocho lanzadores Atlas-RC que pueden estar conectados a escalones de defensa aérea superiores a través de enlaces Link 16 o vía satélite.

Según explica Francis Bordachar, asesor militar de sistemas terrestres de MBDA, el concepto Atlas-RC/LIC²ORNE “aprovecha las lecciones aprendidas en los últimos conflictos en Europa y Oriente Medio”, ofrece una alta resistencia a las contramedidas electrónicas y puede atacar objetivos con baja radiación térmica, como es el caso de los RPAS y los misiles propulsados ​​por turborreactores.