Desde hace varias semanas, Italia lucha con un enorme aumento en el número de personas infectadas por el Coronavirus. Con más de 10.000 muertos y su infraestructura médica al límite de su capacidad, el país aceptó una oferta de ayuda de la Federación Rusa.
El 25 de marzo, un avión de transporte militar ruso aterrizó en Roma. Un convoy de camiones militares se desplazó hacia el norte, hacia Bérgamo, en ayuda a las instalaciones de atención médica italianas que más están luchando contra el brote. Con el Ejército italiano ya involucrado en el mantenimiento del bloqueo impuesto a los países y la sombría tarea logística de transportar los cuerpos fuera de las ciudades, la ayuda rusa parecía ser de importancia clave.
Según fuentes de los medios de comunicación rusos, Rusia envió 600 ventiladores y 100 virólogos y epidemiólogos militares a Italia tras las conversaciones entre el presidente Vladimir Putin y el primer ministro italiano Giuseppe Conte. el sábado anterior.
Sin embargo, La Stampa de Italia informa que, según fuentes en el terreno en las regiones a las que la misión de ayuda rusa se ha dirigido, hasta el 80% de los suministros traídos a Italia por Rusia son «inútiles». El diario de Turín levantó cierta ira en Rusia, con la acusación de Russia Today de «ingratitud». Según La Stampa, la ayuda es en gran parte inútil, informando que «el 80% consiste en materiales absolutamente inútiles o de poca utilidad para Italia». En resumen, es poco más que un gesto».
En este caso, hay que preguntarse: ¿qué trajeron los rusos a Italia?. ¿Por qué la ayuda la proporciona por el Ministerio de Defensa ruso, y no el Ministerio de Salud?. Las fuerzas rusas trajeron principalmente equipo de desinfección, laboratorios de campo para la esterilización y la prevención químico-bacteriológica. A diferencia de la ayuda china, que consistía principalmente en equipo de protección personal, máscaras, desinfectantes y ventiladores, se informa de que el equipo es como una estación de desinfección de campo, es menos útil.
Pueden plantearse más preocupaciones, ya que se ha permitido a los trabajadores de asistencia rusos, personal militar, circular libremente por Italia, un Estado miembro de la OTAN. Con los servicios secretos de inteligencia de Rusia muy activos en toda Europa, la misión de ayuda puede ser una oportunidad difícil de dejar pasar. La misión de ayuda también ha sido descrita por algunos comentaristas como un ejercicio de relaciones públicas. Independientemente de los objetivos de Rusia, con tal propuesta a Italia Putin puso al gobierno italiano entre el martillo y el yunque. Negar la oferta de ayuda de Rusia en este difícil momento podría haber provocado una reacción negativa entre el agotado pueblo italiano.
Sea o no la propuesta de Vladimir Putin una decisión puramente política, la situación en Italia sigue siendo crítica. Con la propagación del brote a otros países podemos observar una completa movilización de las fuerzas armadas en todo el mundo, con la creación de hospitales de campaña y la logística militar. ¿Reducirán estos esfuerzos militares la tasa de mortalidad? Todavía hay esperanza, pero la situación es grave en toda Europa.
Fte.: Overt Defense
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