El Ejército del Aire e Indra confirman la basura espacial generada por el misil ASAT de India

El Ejército del Aire español ha corroborado que el radar de vigilancia espacial S3TSR posicionado en la base aérea de Morón (Sevilla) ha podido “confirmar el derribo” de un satélite de India emplazado a 270 kilómetros de altura, que fue destruido el 27 de marzo por un misil de la misma nacionalidad durante la misión Shakti.

Juan Pons.

La noticia difundida ayer, 2 de abril, por el Cuartel General del Aire, señala que el radar S3TSR ‒acrónimo de Spanish Space Surveillance & Tracking Surveillance Radar también ha podido “identificar fragmentos de basura espacial generados durante el tiempo de vuelo sobre la península Ibérica, alrededor de las 12:43 horas locales”, siendo “el único sensor europeo capaz de obtener medidas de los fragmentos ocasionados por la prueba anti-satélite de India”.

Como responsable del diseño y desarrollo del S3TSR, Indra difundió ayer, 3 de abril, un comunicado en el que notificaba que la detección de la nube de escombros había tenido lugar “solo unas horas después del impacto” y que las primeras observaciones “se produjeron a las 12:45, hora local española, coincidiendo con la primera pasada de los objetos sobre la posición del radar, lo que demuestra su alta precisión y efectividad”.

A la espera de recepcionar y operar oficialmente el radar S3TSR, el Ejército del Aire asegura que “varias horas después de la destrucción del satélite, el número de objetos en órbita debido a la fragmentación rondaba los 270” y que la basura espacial generada por el impacto “se desintegrará en la atmósfera terrestre durante las próximas semanas”.

La Fuerza Aérea resalta que el Centro de Operaciones del Spanish Space Surveillance & Tracking o S3T “continuará programando observaciones de los restos del satélite cada vez que sobrevuelen la península, modificando para ello su objetivo habitual de observación, con la finalidad de obtener información más precisa de la fragmentación”.

A pesar de que las autoridades de Nueva Delhi insisten en que los escombros provocados por la destrucción del satélite ‒previsiblemente el Microsat-R, de 740 kilos de peso‒ han sido expulsados a órbitas superiores a las que órbita la Estación Espacial Internacional (ISS), Jim Bridenstine, administrador y máximo responsable de la NASA, ha alertado que algunos de ellos podrían cruzarse con la trayectoria de ISS, que orbita a una altitud de 410 kilómetros.

Bridenstine también ha indicado que los cálculos efectuados por la Red de Vigilancia Espacial de la Fuerza Aérea de Estados Unidos indican que el impacto se produjo “a 282 kilómetros de altura” y que se han identificado alrededor de “400 fragmentos de escombros, de los que 60 son lo suficientemente grandes para ser rastreados por la citada Red”.

El administrador de la NASA ha calificado de “irresponsable” el disparo ASAT autorizado por Narendra Modi, primer ministro de India, aunque ha señalado que la probabilidad de que algún fragmento ponga en peligro el complejo orbital y a sus actuales seis astronautas “es baja” puesto que, “si fuera necesario, sería posible maniobrar a la ISS para evitar la colisión”.