Las Fuerzas Aéreas están en vías de comprar y poner en servicio su primer avión eléctrico de despegue y aterrizaje vertical que podría transportar pasajeros o carga en el marco del programa Agility Prime en 2023.
Este año, está llevando estos «coches voladores» a más ejercicios y demostraciones para que aviadores y el resto del personal se acostumbren al concepto.
El proyecto de presupuesto de la Fuerza Aérea para el año fiscal 2023 pedía 3,6 millones de dólares para las primeras adquisiciones de Agility Prime, que se emplearían para comprar cinco aviones eVTOL.
El teniente coronel John Tekell, que dirige el programa Agility Prime para la AFWERX, dijo que la compra inicial tendrá lugar el año que viene, y que probablemente le seguirán más selecciones.
«El hecho de que seleccionemos a una empresa para las adquisiciones del 23 no significa que otras tres empresas no cumplan una misión diferente y una capacidad diferente en la que usaremos nuestros futuros fondos de adquisición», dijo en una entrevista el 10 de junio.
La Fuerza Aérea está estudiando 66 usos potenciales para el Agility Prime, incluyendo la posibilidad de emplearlo para infiltrar y exfiltrar tropas de operaciones especiales y rescatar aviadores derribados u otro personal en territorio enemigo donde las condiciones podrían ser demasiado peligrosas para enviar un helicóptero tradicional.
Tekell dijo que los primeros usos del Agility Prime en el mundo real serán probablemente el apoyo a los campos de pruebas y de entrenamiento, así como otras tareas de transporte de carga, aunque podría acabar desempeñando un papel importante en una guerra.
Las Fuerzas Aéreas están especialmente interesadas en cómo Agility Prime podría ayudar a establecer rápidamente bases en una zona de conflicto como parte de su concepto de Agile Combat Employment (empleo de combate ágil), especialmente si las instalaciones han sido gravemente dañadas en un ataque y es preciso restablecerlas rápidamente, dijo.
«A veces, para trasladar partes de una base con rapidez, es necesario realizar una elevación vertical, ya que los aeródromos que hay que trasladar pueden estar muy dañados», explicó Tekell. Puede que «ya no tengan pistas de aterrizaje. Puede que ya no tengan carreteras».
En el pasado, la Fuerza Aérea podría haber tenido que recurrir a los helicópteros tradicionales o a los aviones de rotor basculante para trasladar el equipo o los suministros cuando las carreteras u otras infraestructuras eran inutilizables. Tekell dijo que la capacidad de despegue y aterrizaje vertical eléctrico del Agility Prime puede hacer ese trabajo de una forma más sencilla y con mucho más ahorro de combustible.
Y sería mucho más barato que un helicóptero tradicional, «órdenes de magnitud menos… tanto en la adquisición como en las operaciones y el mantenimiento», dijo.
Queda por ver cuál será el precio final de Agility Prime, aun se están discutiendo los costes de adquisición con las empresas, pero Tekell dijo que podría oscilar entre unos pocos cientos de miles y 5 millones de dólares por unidad. La Fuerza Aérea tiene ahora contratos con 14 empresas para producir aviones a escala real que podrían emplearse en última instancia para Agility Prime, dijo Tekell.
Algunas de esas empresas contratadas para este programa son Lift Aircraft de Austin (Texas) y Beta Technologies de Burlington (Vermont). En marzo, dos pilotos del Ejército del Aire se convirtieron en los primeros aviadores en pilotar un avión eléctrico con aeronavegabilidad militar cuando hicieran un vuelo con el avión ALIA de Beta.
Cuando el Ejército del Aire decida cómo gastar esos fondos iniciales de adquisición, Tekell dijo que considerará a cualquier empresa que demuestre que puede alcanzar los hitos técnicos y de fabricación necesarios, y estudiará si las capacidades de esas aeronaves serían útiles para la variedad de conjuntos de misiones que el servicio podría necesitar.
Dijo que «definitivamente no será una sola empresa» la que obtenga un contrato Agility Prime, porque el Ejército del Aire quiere fomentar el crecimiento de la industria y la cadena de suministro de eVTOL en Estados Unidos.
«No es algo con lo que vayamos a sustituir los activos existentes», dijo Tekell. «Esto es algo que se usa junto con ellos para hacer que sus operaciones sean significativamente más eficientes».
Las pruebas de Agility Prime realizadas por las Fuerzas Aéreas el año pasado, incluida una demostración el pasado mes de marzo que demostró que la plataforma Hexa de Lift Aircraft podía encajar y ser transportada con seguridad en un avión de carga militar, fueron un éxito, dijo Tekell. Y este año, Tekell dijo que quiere que los aviones Agility Prime salgan al público para que más aviadores puedan verlos en acción y demostrar que son capaces y seguros. Este será un paso importante para conseguir que el Agility Prime se considere una parte aceptada y cotidiana de la flota, dijo.
El despliegue público incluirá la asistencia a la feria aérea de Oshkosh (Wisconsin) el mes que viene, así como demostraciones en vivo y participaciones en ejercicios. El mes pasado, el avión Hexa de Lift hizo su aparición en el ejercicio Emerald Warrior para operaciones especiales en Hurlburt Field (Florida), y podrían realizarse más demostraciones en el Army´s Project Convergence y en los ejercicios Black Flag, Red Flag y Orange Flag aéreos.
Esto será más fácil en un futuro próximo, dijo, a medida que las empresas amplíen sus líneas de fabricación y construyan más aviones eVTOL que se podrían aprovechar en las demostraciones.
Agility Prime aún no es un programa financiado y, en un movimiento inusual, podría terminar siendo puesto en servicio sin llegar a ese paso. El programa está asociado con la oficina ejecutiva del programa de movilidad del Air Force Materiel Command, dijo Tekell, y Agility Prime puede adquirir y mantener aviones con su estructura y asociaciones actuales sin alcanzar el estatus de programado.
La Fuerza Aérea quiere que Agility Prime no sólo desarrolle capacidades innovadoras para los aviones eléctricos, también quiere agilizar el proceso de adquisición. La tecnología evoluciona rápidamente en la aviación eléctrica, dijo Tekell, y la adquisición también debería hacerlo. Si el programa hubiera pasado por el proceso de adquisición del Developmente and Integration System (Sistema de Integración y Desarrollo de Capacidades Conjuntas), dijo, habría tardado años más, y la tecnología de Agility Prime ya habría quedado desfasada y menos útil para cuando se pusiera en marcha.
Fte. C4ISRNET