Datos de una investigación encabezada por la marca hermana de Defense News, el Military Times, revelaron que la Fuerza Aérea desplegó en Afganistán a mediados de la década de 2010, un avión no tripulado de producción propia llamado «Silver Fang».
Existe muy poca información disponible en línea sobre este sistema. La noticia surgió en el contexto de datos sobre accidentes de aviación obtenidos por el Military Times, que reveló por primera vez el alcance de las pruebas de Silver Fang en Afganistán.
«El Silver Fang es un programa del Laboratorio de Investigación de la Fuerza Aérea (AFRL), que proporciona inteligencia, vigilancia y capacidad de reconocimiento, basándose en un pequeño sistema aéreo no tripulado, que no depende de una pista de aterrizaje, de nivel II», dijo Daryl Mayer, portavoz de la Base de la Fuerza Aérea Wright-Patterson en Ohio, donde se encuentra el AFRL.
Una foto de la aeronave que apareció en una presentación del AFRL en agosto de 2015, muestra un avión de ala fija, lanzado sobre rieles, con una bola sensor en la parte trasera de la aeronave.
Según el sitio web patrocinado por el AFRL, Launch Stories, el Silver Fang es un derivado del Silver Fox UAS, originalmente desarrollado por la división de tecnologías no tripuladas de BAE Systems, que ahora forma parte de Raytheon.
Originalmente, se empleó en el teatro de operaciones para encontrar terroristas, que colocaban artefactos explosivos improvisados a lo largo de las rutas de los convoyes. Una misión para la que era especialmente adecuado, debido a su tamaño, lo suficientemente grande como para transportar cargas útiles importantes, al tiempo que lo suficientemente pequeño, como para funcionar de forma muy silenciosa durante el vuelo.
El Silver Fox ya integraba un sensor de infrarrojos electroóptico, pero el AFRL le añadió otro de radiofrecuencia, con un amplio campo de visión para ayudar a apuntar el sensor de EO/IR, e identificar más rápidamente los dispositivos explosivos improvisados, apuntó el artículo de Launch Stories.
La experiencia con el Silver Fang en Afganistán plantea preguntas interesantes. ¿Con qué frecuencia se operaba? ¿Hasta qué punto tuvo éxito en la búsqueda de IEDs? ¿Los continuos problemas de comunicación y propulsión tuvieron algo que ver con la razón por la que el programa fue aparentemente cancelado? ¿O fue cuestión de financiación?
Defense News contactó con el AFL con la esperanza de obtener respuestas a estas preguntas. La organización pudo confirmar la existencia de la aeronave, pero se negó a hacer más comentarios sobre sus actividades anteriores por razones de clasificación.
Durante una audiencia celebrada en septiembre de 2016 ante un panel del Congreso, el general de división Robert McMurry, entonces director del AFRL, citó al Silver Fang como una historia de éxito, de cómo la organización puede trasladar rápidamente las tecnologías del desarrollo al terreno. Sin embargo, también señaló la dificultad de su transición a los programas financiados.
«Lo que impide esa transición, es difícil de explicar, pero creo que en realidad sólo se trata de llegar al acuerdo de que vamos a hacer la transición, de cómo vamos a ponerla en marcha y qué Ejército se encargará de pagar esa factura y cuándo», dijo.
Fte. Defense News