Sparus II: el USV español que formará parte de la red de mando y control de vehículos autónomos de la OTAN

El Sparus II, un pequeño vehículo submarino autónomo desarrollado en España, se ha convertido en una pieza clave para la Armada en tareas tan delicadas como la detección de minas o la vigilancia de infraestructuras submarinas. Con apenas 1,6 metros de longitud y 52 kilos, este dron sumergible representa un salto cualitativo en seguridad y eficacia, reduciendo riesgos para los buceadores y aumentando la capacidad operativa de las Fuerzas Armadas. En Septiembre, pasará a formar parte de la red de mando y control de vehículos autónomos de la OTAN.

Sparus II
El Sparus II en el stand de la Armada durante FEINDEF// (Foto: El Radar) 

Fabricado en España, capaz de sumergirse hasta los 200 metros de profundidad y eficaz en ejercicios internacionales.

El Sparus II es un pequeño vehículo submarino autónomo de fabricación española que lleva casi dos años al servicio de la Armada. Su principal función es explorar el fondo marino y detectar minas, así como se dedica a labores de inspección de infraestructuras críticas, lo que permite reducir significativamente los riesgos para los buceadores humanos.

Actualmente, la Armada cuenta con dos unidades de este tipo de dron submarino, que mide 1,6 metros, pesa 52 kilos y es capaz de operar a profundidades de hasta 200 metros, y con una autonomía de entre 8 y 10 horas. Uno de ellos está asignado a la Fuerza de Medidas contra Minas, que lo ha utilizado en diversos ejercicios, como el ‘ESP Minex25’, mejorando su interoperabilidad y eficacia en tareas de detección de minas en zonas de difícil acceso para los buques cazaminas.

Además, estos robots han sido puestos a prueba en operaciones de vigilancia de infraestructuras submarinas durante el ejercicio ‘Marsec’, organizado por la Fuerza de Acción Marítima, así como en maniobras de rescate de submarinos, como el ejercicio ‘Cartago’.

En septiembre, los Sparus II darán un paso más en, ya que pasarán a formar parte de la red de mando y control de vehículos autónomos de la OTAN. Este sistema es un claro ejemplo de cómo la alta tecnología se ha convertido en un aliado esencial para las Fuerzas Armadas.