Próxima competición, que podría llevar a los robots a enfrentarse directamente al enemigo

Vehículo robotizado experimental M113 blindado (con monitor humano a bordo por seguridad) en el Campamento Grayling en 2017

El Ejército de EE.UU. está a punto de iniciar un concurso por vehículos de combate robóticos, ligeros y medianos, mediante una solicitud de propuestas, según el general de brigada Ross Coffman, jefe de modernización de vehículos de combate.

El plan consiste en la adjudicación de un contrato para la construcción de una versión ligera de vehículo robótico de combate (RCV), y repetir el proceso para otro de tamaño medio en marzo de 2020. A continuación, cada empresa seleccionada entregará cuatro prototipos para su evaluación y prueba de 12 meses, dijo Coffman a Defense News en una entrevista reciente.

El Ejército prevé un gran número de aspirantes, basándose en una evaluación reciente de ocho vehículos diferentes en un recorrido realizado en el campus RELLIS de la Universidad de Texas A&M, y debido a que la respuesta a una solicitud de documentos técnicos para cada versión fue fructífera.

El nivel de los vehículos en la demostración física fue más alto de lo esperado. Las compañías «lo tomaron muy en serio» y trajeron vehículos que no eran sólo versiones «modificadas y listas para usar», dijo Coffman, sino que estaban «más próximos al propósito final de lo que nunca imaginamos», añadió.

El Ejército está enfocado, a través de las tres clases de peso del vehículo robótico que se desea,  en un chasis en lugar de en un vehículo en su conjunto. La idea es integrar los sistemas de misión en un chasis común para cada categoría de peso.

En el caso de los pesos pesados, el Ejército completó un importante experimento el mes pasado en el Campamento Grayling, Michigan, donde se evaluaron cuatro versiones robóticas del vehículo blindado de transporte de tropas M-113, para determinar sus capacidades robóticas terrestres. En el evento, al que seguirán rigurosas pruebas y evaluaciones en el campo de pruebas de Aberdeen, Maryland, cuatro vehículos robóticos de combate se movieron a través del campo de batalla en formación de cuña. Los soldados controlaban las plataformas para mantenerlos fuera de peligro.

«Se conectaron, identificaron a un enemigo e hicieron fuego a petición de los humanos, que se basaron en los sensores del robot», dijo Coffman. «Y luego, una vez que la artillería intervino, los robots continuaron progresando y enfrentándose con fuego directo contra un enemigo, destruyéndolo, mientras los humanos estaban en un santuario controlando el campo de batalla.»

El ejercicio demostró a Coffman que los RCVs pesados pueden reducir el riesgo a los soldados en el campo de batalla.

Una vez que el Army Test and Evaluation Command pueda encaminar a cada vehículo, las plataformas se dirigirán a Fort Carson, Colorado, en marzo de 2020. «Vamos a ponerlos en manos de los soldados para que los ensucien, ejecuten operaciones tácticas y combatan contra una fuerza real», dijo Coffman. «Vamos a ver todas sus capacidades».

Después de esa fase, el Ejército planea evaluar cuatro M113, cuatro RCVs medianos y cuatro ligeros, que formarán una compañía y ejecutarán formaciones tácticas, a medida que el Ejército desarrolle su capacidad, según Coffman. Ya, en 2023, el Ejército evaluará variantes pesadas construidas a propósito, que actuarán con los RCV medianos y ligeros en formación de compañía, agregó Coffman.

Fte. C4ISRNET