La Navy está organizando un nueva fuerza multinacional para la región del Mar Rojo, donde el contrabando y los ataques con misiles son una de las principales preocupaciones, con el fin de aumentar la coordinación con las armadas regionales y la disuasión de las actividades ilegales.
La Combined Task Force 153 «se centrará en la seguridad marítima internacional y en la creación de capacidades, concretamente en el Mar Rojo, estrecho de Bab el-Mandeb y Golfo de Adén. Se trata de aguas de importancia estratégica que merecen nuestra atención, y cualquier actividad desestabilizadora, incluidas las amenazas al tráfico comercial y a las infraestructuras costeras, puede tener profundas repercusiones mundiales», declaró el miércoles a la prensa el Vicealmirante Brad Cooper, Comandante del Mando Central de las Fuerzas Navales, la 5ª Flota de EE.UU. y las Fuerzas Marítimas Combinadas.
El Mar Rojo es una importante ruta marítima que conduce al Canal de Suez y está rodeado por varios países, entre ellos Arabia Saudí, Egipto, Yibuti y Yemen. La región se enfrenta a problemas de seguridad que incluyen el contrabando de drogas y armas, y las amenazas planteadas por los rebeldes Houthi de Yemen, que han lanzado ataques contra Arabia Saudí y un misil en el propio Mar Rojo en marzo.
La Combined Maritime Force es una asociación naval liderada por Estados Unidos con 34 naciones. Cuenta con otras tres fuerzas especiales: una para la lucha contra la piratería (CTF 151), otra para las operaciones de seguridad marítima dentro del Golfo Arábigo (CTF 152) y otra para la seguridad marítima fuera del Golfo Arábigo (CTF 150). La nueva fuerza operativa permitirá a la CTF 150 centrarse únicamente en el Golfo de Omán, el Mar Arábigo septentrional y las aguas que van desde el Mar Arábigo septentrional hasta la frontera entre Yemen y Omán, explicó Cooper.
Una de las misiones de la Fuerza Especial será detener el flujo de armas y drogas ilegales. Cooper dijo que su estructura de mando y la coordinación con otras armadas que patrullan regularmente las aguas aumentarán la disuasión contra las actividades ilegales en la región.
«Más concretamente, creo que nos encontraremos en mejor posición para hacer frente a la serie de retos a los que nos enfrentamos en términos de contrabando de drogas y armas que están bien documentados en la región», dijo.
La task force no aumentará el número de buques o aviones en la región; Cooper afirmó que ya hay suficientes para llevar a cabo la misión. Los buques se desplazan por la zona de la 5ª Flota y a los distintos grupos operativos en función de la misión y sus requisitos.
«Así que se trata de un acuerdo muy fluido y dinámico. Y tanto para EE.UU. como para nuestros países socios, el número de buques y aeronaves comprometidos varía mucho en función de las prioridades y de lo que intentamos conseguir», declaró.
La nueva task force se constituirá oficialmente el 17 de abril en el cuartel general de la 5ª Flota de Estados Unidos en Bahréin y estará dirigida inicialmente por un oficial de la Armada de Estados Unidos. A continuación, el personal del grupo operativo se embarcará en el buque de mando anfibio USS Mount Whitney para las operaciones iniciales. Cooper dijo que esperan que el grupo operativo sea dirigido por un socio regional a finales de este año.
Fte. Defense One