El avión de entrenamiento de combate Yak-130 lo diseñó la Oficina de Diseño Yakovlev junto con la italiana Aermacchi, y la producción se inició en 2009 por la Corporación Irkut en Rusia.
Uno de los puntos fuertes del avión fue un motor AI-222-25 de diseño ucraniano, creado por Ivchenko-Progress SOE. Posteriormente, el motor fue producido por el Centro de Producción Científica de Salyut para la Construcción de Turbinas de Gas de Rusia, de conformidad con un acuerdo de licencia entre las empresas ucraniana y rusa.
En 2015, cuando expiró el acuerdo de licencia, Irkut Corporation, el fabricante del Yak-130, debería haber cambiado el sistema de propulsión principal de la aeronave, pero en su lugar la empresa simplemente violó los derechos de autor del diseño ucraniano del motor, y comenzó su propia producción de piezas de repuesto para sustituir los componentes originales ucranianos.
Al mismo tiempo, los medios de comunicación rusos también empezaron a difundir informes que afirmaban que la fábrica de Salyut, con sede en Moscú, había sustituido con éxito y en su totalidad los componentes ucranianos de los motores Yak-130.
Pero hubo problemas operativos con respecto a la fiabilidad de los nuevos motores copiados. El 16 de septiembre de 2017, un Yak-130 se estrelló cerca del aeródromo de Borisoglebsk (región de Voronezh) durante un vuelo de entrenamiento. La tripulación se eyectó. Los informes de los medios de comunicación sugirieron que una posible causa del accidente fue una falla abrupta de los sistemas del motor.
El 12 de abril de 2018, también en Borisoglebsk, se estrelló un segundo Yak-130. Durante un vuelo de entrenamiento programado, el avión experimentó un mal funcionamiento técnico de una de las unidades. Ambos pilotos se eyectaron.
El fabricante ruso no sólo está violando el acuerdo de licencia para el uso de motores ucranianos, sino que también está produciendo Yak-130 con motores que no han sido actualizados y que carecen de la calidad necesaria en el mantenimiento técnico, de acuerdo con las normas exigidas por la oficina de diseño original. Esto plantea una amenaza potencial para la seguridad no sólo de la propia Fuerza Aérea rusa, sino también para la seguridad de la aviación en todo el mundo.
A pesar de los incidentes y los interrogantes sobre la fiabilidad de los motores copiados, Rusia ha estado promocionando el avión Yak-130 en los mercados extranjeros. Sólo en 2018, el avión fue exhibido, por ejemplo, en Indo Defense 2018 (Indonesia), FIDAE 2018 (Chile) y EDEX-2018 (Egipto), entre otras exposiciones internacionales de armas.
Sin embargo, altos funcionarios rusos, incluido el ex viceprimer ministro Dmitry Rogozin, han expresado su insatisfacción con los productores rusos de motores de aviación, cuando dicen que van a la zaga de sus competidores.
Los modelos de la competencia para el Yak-130 incluyen el Honhdu L-15 fabricado en China y el Aermacchi M346 italiano. Según los expertos en aviación, este último supera al Yak-130 en cuanto a su ligereza y perfil aerodinámico.
Fte. Army Guide