Misiles hipersónicos de largo alcance contra objetivos en movimiento

La Navy dispone de misil Tomahawk, que cuenta con un enlace de datos bidireccional que le permite cambiar de ruta en vuelo cuando los objetivos lo hacen, además de una versión marítima del misil que puede ajustarse en vuelo a objetivos en movimiento en el mar.

También, el misil SM-6 está equipado con un buscador de modo dual que permite al arma enviar un ping electromagnético, analizar el retorno y ajustar el curso según sea necesario para destruir objetivos en movimiento. Producido por Raytheon Technologies puede llevar a cabo guerra antiaérea, antisuperficie o una defensa avanzada contra misiles balísticos en el mar.

En la actualidad, se emplean láseres semiactivos para localizar objetivos en movimiento en los misiles Hellfire, artillería e incluso bombas lanzadas desde el aire. La precisión contra objetivos en movimiento… existe, la capacidad de cambiar de rumbo en vuelo existe y la capacidad de que un solo misil alcance más de un objetivo con múltiples vehículos de reentrada también existe.

Armas hipersónicas

¿Y qué pasa con las armas hipersónicas? Los misiles hipersónicos de EE.UU. ya se están disparando y pronto alcanzarán el estado operativo, en parte debido al impulso masivo para acelerar, probar y acelerar la tecnología en respuesta a Rusia y China. Los misiles hipersónicos están esencialmente «aquí», así que ¿qué hay de la capacidad de atacar objetivos en movimiento? ¿Y de la capacidad de alcanzar múltiples objetivos con varias ojivas cargadas en una sola arma?

Arma hipersónica de largo alcance: inserción tecnológica

Los desarrolladores están tratando de adelantarse a estos retos incorporando la posibilidad de realizar inserciones tecnológicas en su arma hipersónica en desarrollo, la Long Range Hypersonic Weapon (arma hipersónica de largo alcance).

«Hemos establecido prioridades para la inserción tecnológica a corto plazo. Planeamos mantener el riesgo en múltiples objetivos enemigos  a través de la comunicación con el arma en vuelo y atacar un objetivo en movimiento o reubicado. También mejoraremos la ojiva», dijo Strider. Robert Strider, adjunto de la Army Hypersonic Project Office, dijo a una audiencia el 11 de agosto en el Space and Missile Defense Symposium en Huntsville Ala,

¿Cómo podría funcionar? Ciertamente, la dificultad de establecer cualquier tipo de enlace de datos bidireccional con un arma que se mueve tan rápido como un misil hipersónico es probablemente bastante difícil.

Arquitectura abierta

Al mismo tiempo, puede haber enlaces de datos RF en evolución u otras tecnologías de capa de transporte de alta velocidad capaces de ayudar a un misil a maniobrar hacia objetivos en movimiento. Un área de posibilidades reside en la perspectiva de las actualizaciones de software, ya que pueden mejorar rápidamente los sistemas de guiado de armas y las funciones de detección sin tener que reconfigurar necesariamente el hardware.

Este fue el caso de las actualizaciones del SM-6 y del SM-3, así como de las actualizaciones de las armas aire-aire y aire-tierra lanzadas por los cazas F-22, como el AIM-9X y el AIM-120D.

También está la cuestión de la autonomía o semiautonomía. Armas como el misil antibuque de largo alcance lanzado desde el aire se describen como semiautónomas, lo que significa que llevan incorporada una tecnología de detección junto con la capacidad de discernir nuevos objetivos y autocorregirse hasta cierto punto.

Sin duda, parece factible que un misil hipersónico pueda construirse con este tipo de tecnología, aunque es posible que tenga que funcionar de forma diferente dada la velocidad y la trayectoria de vuelo de las armas hipersónicas.

Al mismo tiempo, la velocidad de procesamiento de los ordenadores puede realizar millones de funciones por segundo, por lo que, en teoría, el análisis de los datos podría realizarse con bastante rapidez en caso de que la nueva información requiriera un cambio en la trayectoria de vuelo. La conexión en red también podría desempeñar un papel importante, ya que tal vez un avión no tripulado, un barco de superficie, una estación de control en tierra o incluso un satélite podrían enviar nuevos datos de puntería al arma… en cuestión de segundos.

Por ejemplo, las Fuerzas Aéreas disponen incluso de una tecnología de «bomba colaborativa» mediante la cual las bombas en vuelo pueden compartir datos, corregir el rumbo y discernir nuevos objetivos sin necesidad de intervención humana.

Esta es una de las razones principales por las que muchos desarrolladores de armas usan el término «arquitectura abierta», una frase que se usa a menudo para referirse a los esfuerzos por diseñar una plataforma determinada con protocolos IP estándar, interfaces y una infraestructura técnica tal que pueda acomodar rápidamente nuevas tecnologías y actualizaciones a medida que vayan estando disponibles.

Fte. Warrior Maven