Los satélites de alto costo son vulnerables a amenazas de bajo costo

A pesar de los avances en la tecnología satelital, muchos de los activos más caros y necesarios de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos siguen siendo vulnerables a las interferencias de herramientas baratas, según un nuevo informe del Proyecto de Seguridad Aeroespacial del CSIS.

«La tecnología necesaria para interferir muchos tipos de señales de satélite está disponible comercialmente y es relativamente barata», dice el informe. Por otra parte, amenazas electrónicas como el spoofing, que intenta engañar a los receptores para que crean que los datos manipulados por un atacante son reales, también ofrecen opciones de bajo coste a los adversarios que esperan interferir la conectividad por satélite. Este tipo de ataques pueden interrumpir las comunicaciones o las técnicas de posición, navegación y cronometraje.

El informe, publicado el 12 de abril y titulado «Space Threat Assessment 2018» (Evaluación de la amenaza espacial en 2018), señala que mientras que los adversarios cercanos a Estados Unidos han hecho avances en armas cinéticas más avanzadas, como las armas antisatélite de ascenso directo, la tecnología de interferencia también se considera crítica. Por ejemplo, «China ha hecho del desarrollo y despliegue de sistemas interferidores de satélites una alta prioridad», según los autores, Todd Harrison, Kaitlyn Johnson y Thomas Roberts.

Otro país cercano, Rusia, ha demostrado su capacidad de interferencia y spoofing en los conflictos en curso en Ucrania y Siria. El informe dice que el uso de la tecnología rusa en estos conflictos «demuestra que Rusia conserva capacidades avanzadas de ataque electrónico, a pesar de las afirmaciones de algunos analistas de que su capacidad ha disminuido desde 1991».

Pero la amenaza de jamming y ataques engañosos va más allá de los países cercanos en cuanto a nivel tecnológico. Irán y Corea del Norte también han demostrado la capacidad y la voluntad de interferir las comunicaciones por satélite y las señales GPS, según el informe.

Y es probable que esa capacidad de interferir y falsificar señales se extienda. El informe señala que una vez que se ha desarrollado un bloqueador o spoofer, «es relativamente barato producirlo y desplegarlo en grandes cantidades, con lo que la proliferación a otros actores estatales y no estatales».

Pero Estados Unidos no se queda de brazos cruzados. Los satélites de Advanced Energy High Frequency de la Fuerza Aérea, reservados para la comunicación segura, «incorporan un alto grado de protección contra interferencias, spoofing y otras formas de ataque electrónico», según el informe.

Estados Unidos también está preparando tropas para operar en entornos sin GPS. En enero, el Departamento de Defensa interfirió las señales GPS en los estados occidentales para que los pilotos pudieran entrenar en entornos que probablemente caracterizarían el combate en la era de la guerra electrónica.

Fte. Defence News