El Gobierno holandés ha aplazado la decisión de sustituir sus cuatro submarinos de la Clase Walrus, informando al Parlamento de que es necesario seguir estudiando la cuestión hasta el verano.
El Gobierno holandés ha aplazado la decisión de sustituir sus cuatro submarinos de la Clase Walrus, informando al Parlamento de que es necesario seguir estudiando la cuestión hasta el verano.El hecho, anunciado en una carta a finales del mes de abril por la Secretaria de Estado de Defensa, Barbara Visser, llega cuando algunos esperaban que se tomara una decisión esta primavera. Los responsables del Gobierno afirman ahora de que necesitan más tiempo para estudiar las últimas ofertas de los competidores, relacionadas con la participación de la industria nacional en sus propuestas.
Las empresas que compiten por el contrato multimillonario de Walrus son Naval Group de Francia, Navantia de España, Saab’s Kockums de Suecia y ThyssenKrupp Marine Systems de Alemania.
El estudio adicional sigue a los intentos de los competidores de modificar sus propuestas, a la luz de una nueva estrategia de la industria de defensa holandesa publicada en noviembre. Ese documento prescribe que, la producción de plataformas marítimas sigue siendo en su mayor parte un asunto nacional, con aproximadamente el 25 por ciento de los proyectos provenientes de colaboraciones internacionales.
«Los Países Bajos tienen la ambición de diseñar y producir por sí mismos ciertas capacidades militares», dice un resumen del documento de estrategia. «Al hacerlo, tendremos en cuenta las industrias que ya están presentes en los Países Bajos, así como la capacidad del país y sus posibles limitaciones. ¿Qué significa esto en términos concretos? Queremos preservar y fortalecer nuestra industria naval, por ejemplo».
El equipo de Saab Kockums, que incluye al astillero holandés Damen, ha promocionado su énfasis en la participación en el trabajo de la industria nacional, aunque el competidor TKMS hizo un esfuerzo desesperado a principios de este año para anunciar una propuesta de producción holandesa si así lo desea.
Según los medios de comunicación locales, esa estrategia pareció caer en oídos sordos, y un periódico informó en febrero que un ejecutivo de TKMS fue inducido a creer que su compañía estaba fuera de la carrera.
La carta de Visser, sin embargo, deja claro que los cuatro competidores siguen en la carrera y que están sujetos al análisis industrial adicional. La decisión del proveedor, conocida como la letra B en los círculos holandeses de compras de defensa, se espera «alrededor» del verano, escribió. También se espera que entonces se tomen decisiones sobre el número de barcos y el presupuesto, añadió.
Fte. Defense News
