Las Fuerzas Especiales rusa están recibiendo minisubmarinos futuristas

Originalmente diseñados para la exploración petrolera, las seis batiesferas llegarán en 2022.

La próxima vez que Vladimir Putin decida poner «hombrecitos verdes» en un país ilegalmente, las tropas Spetsnaz podrían llegar en un futurista submarino de inmersión profunda, según el medio de comunicación ruso Tass.

Originalmente encargados por Gazprom para inspeccionar y trabajar en tuberías submarinas, los sumergibles esféricos -más propiamente llamados batiscafos- presentan ventanas acrílicas super-resistentes en un marco de titanio. Se pueden transportar a sus misiones a bordo de barcos civiles o militares, llevar tres soldados a una profundidad de 2,5 kilómetros y tienen una autonomía de entero, dijo Tass.

Esto significa que los submarinos pueden «operar en el fondo del mar en muchas partes del océano», dice Samuel Bendett, investigador de la CNA Corporation y becario de Estudios sobre Rusia en el Consejo de Política Exterior de Estados Unidos.  «El hecho de que no haya limitaciones sobre qué barco puede llevarla ni a donde, significa que habría menos limitaciones para que las Fuerzas Especiales Rusas actuaran.»

La Armada rusa ha ordenado que seis de los submarinos se entreguen en 2022, para su despliegue en las flotas del Norte, el Pacífico y el Mar Negro, dijo Tass.

La Marina de Estados Unidos también está desarrollando sumergibles de combate tripulados para sus SEAL. En 2016, Lockheed Martin recibió un contrato de 166 millones de dólares para diseñar y construir nuevos submarinos de combate basados en su sumergible comercial S301i. Las pruebas se completarán este año.

Fte. Defense One