La medicina del Ejército, la cirugía robótica y otros procedimientos de alta tecnología

Los médicos militares asignados a unidades que no tienen un hospital de campaña cercano, podrían realizar cirugías delicadas y altamente especializadas en soldados heridos, utilizando robótica y otras formas de telemedicina.

El Teniente General Nadja West, Cirujano General del Ejército, dijo recientemente que las demandas de futuros campos de batalla obligarán a la comunidad médica militar a prepararse para entornos operativos muy diferentes.

«Es posible que no dispongamos de la «hora de oro», un sistema de evacuación a la que hemos estado acostumbrados durante los últimos 17 años», dijo West recientemente en un acto de la Asociación del Ejército de Estados Unidos. «Nuestros soldados podrían estar aislados durante 72 horas o más, lo que requerirá cuidados médicos prolongados en el campo si resultan heridos en un entorno austero», dijo.

Es posible que la superioridad aérea enemiga no permita la evacuación de los heridos graves a hospitales bien equipados, por lo que los de campaña podrían tener que depender de las tecnologías robóticas para salvar a los pacientes, agregó West.

La cirugía robótica, que actualmente se utiliza en procedimientos no invasivos, podría adaptarse para satisfacer las necesidades del campo de batalla del Ejército, dijo.

«Ya se está realizando cirugía robótica», dijo West, y agregó que el desafío será «la rapidez con la que podamos ampliarla en toda nuestra empresa».

El Ejército realizó su primera cirugía robótica en 2016 en el Centro Médico del Ejército William Beaumont en El Paso, Texas, utilizando el sistema quirúrgico da Vinci Xi. Se trata de un sistema de cirugía mínimamente invasiva de cuatro brazos, que puede ser controlado por un cirujano mediante un sistema de imágenes 3D de alta definición, que muestra una vista ampliada de la anatomía del paciente.

El uso de otras formas de tecnología de telemedicina permitirá que un especialista lleve a un profesional médico a través de un procedimiento crítico usando tecnología satelital, dijo West.

«Esto lo probamos en Fort Campbell, Kentucky. … Había un soldado en una zona muy remota que tenía algo llamado absceso periamigdalino, que es una emergencia quirúrgica», dijo. El procedimiento requirió de un otorrinolaringólogo para realizar, lo que puede ser una cirugía delicada, aseguró West.

«Se situó una mira en la garganta del soldado, que permitió ver a un otorrinolaringólogo que estaba a miles de kilómetros de distancia, quien instruyó al profesional médico in situ dónde hacer la incisión y dónde drenar», explicó.

El procedimiento evitó que el paciente tuviera que ser evacuado, dijo West, y agregó que la comunidad médica del Ejército debe ser capaz de adaptarse a situaciones como ésta en el futuro.

«Siempre debemos estar listos y preparados para actuar en escenarios no tradicionales y de maneras que podrían estar fuera de nuestra zona de confort», dijo.

Fte. Military.com