La expulsión de Turquía del Programa del avión F-35 una oportunidad para España

Si Estados Unidos expulsa a Turquía del programa F-35 Joint Strike Fighter, tendría nuevos alicientes para poder vender este avión de combate a otros aliados y a España se le abre la oportunidad de cofabricación de piezas.

Esto se debe a que los contratos para las más de 900 piezas del F-35 que se fabrican actualmente en Turquía, podrían ofrecerse a países que están considerando comprar el avión, como Canadá, Finlandia, Suiza y España. Es una práctica común de los fabricantes de armas de Estados Unidos endulzar los acuerdos de exportación, ofreciendo a los clientes potenciales trabajo de fabricación y coproducción e incluso transferencia de tecnología.

Los responsables de Estados Unidos han amenazado durante mucho tiempo con echar a Turquía del programa F-35 si comprara el sistema de defensa aérea S-400 a Rusia. El día 12, las autoridades turcas anunciaron que habían comenzado a recibir el S-400, como consecuencia, el Pentágono anunció y luego canceló las conferencias de prensa del viernes para discutir su respuesta.

El mes pasado, Ellen Lord, subsecretaria de defensa para la adquisición y el mantenimiento, dijo que los encargados del programa de la JSF en el Pentágono y el contratista principal Lockheed Martin habían conseguido proveedores de suplentes para las piezas del F-35 fabricadas en Turquía.

«Se trata predominantemente, de fuentes estadounidenses», dijo Lord en una reunión informativa el 7 de junio en el Pentágono. «Eso no quiere decir que no continuaremos haciendo lo que siempre hacemos en una buena gestión del programa y busquemos otras fuentes, porque nos gustaría tener segundos y terceros proveedores para la mayoría de los elementos».

En efecto, unas semanas después, durante una entrevista en el Salón Aeronáutico de París, Greg Ulmer, gerente general del programa F-35 de Lockheed Martin, dijo que las piezas del avión las fabrican una o más compañías.

También está la cuestión de qué hacer con los F-35 de Turquía. Alrededor de 30 de los F-35 de Turquía se encuentran en diversas etapas de producción, según una fuente familiarizada con las órdenes de Ankara. Cuatro de los aviones están en la base Luke de la Fuerza Aérea en Arizona, donde se utilizan para el entrenamiento de pilotos. Estaba previsto que Turquía recibiera entre cinco y 10 F-35 al año en la década de 2020.

Estos aviones podrían ofrecerse a los compradores de F-35 existentes o a los nuevos clientes de F-35, incluida Polonia.

En mayo, la directora ejecutiva de Lockheed, Marillyn Hewson, dijo que la empresa podría vender fácilmente los F-35 de Turquía a otros países.

Fte. Defense One