La contratación pública: Demasiado bueno, demasiado caro, demasiado poco

IFV ruso T-15En septiembre, Rusia publicó vídeos de los dos prototipos de su nuevo diseño de IFV (vehículo de combate de infantería), el T-15. Esta es la primera prueba de que esta variante de Armata existe. Los T-15 mostrados se parecen a un tanque T-14 sin la torreta y puede que sea así, porque los T-15 del vídeo se describen como vehículos de 48 toneladas propulsados por un diésel de 1.500 CV. La velocidad máxima en carretera es de 70 kilómetros por hora  y la autonomía 550 km. Se dice que este T-15 tiene la misma protección de blindaje que el tanque T-14.

Israel presentó un IFV similar en 2009. Se trataba del IFV Namer, que aprovecha el chasis de los antiguos tanques Merkava. En un principio, Israel tenía previsto construir 600, pero los recortes presupuestarios y la reducción de las amenazas militares lo han reducido a menos de 200 hasta ahora. La producción puede reanudarse si es necesario, pero hasta ahora sólo hay unos 120 en servicio. Varios batallones de infantería ya están equipados con Namer, sobre todo en la Brigada Golani, al norte, cerca de la frontera libanesa. A principios de 2010, Israel empleó varios IFV Namer en Gaza. Esta fue la primera experiencia de combate para el Namer, y funcionó como se esperaba. Uno de ellos se empleó como puesto de mando avanzado, lo que permitió a los oficiales acercarse a los combates y, mediante el uso de varias radios y sensores, desplazar rápidamente fuerzas y solicitar apoyo aéreo sobre objetivos específicos.

El Namer se basa en el chasis de los antiguos tanques de las series Merkava I y II. Estos vehículos están siendo retirados, por lo que pueden ser desechados o reciclados. Cn el grueso blindaje del Merkava y la torre retirada, se le ha añadido una ametralladora pesada controlada desde el interior del vehículo en la parte superior. El Merkava se presta a este tipo de modificaciones, porque lleva el motor montado en la parte delantera y tiene una puerta en la trasera.

El Namer pesa 60 tn. con una tripulación de tres personas y espacio para nueve soldados. Dispone de una estación de armas a distancia (RWS) que puede montar una ametralladora de 12,7mm. o un lanzagranadas automático de 40mm. También integra una ametralladora de 7,62 mm operada por un pasajero desde una escotilla abierta. El Namer está propulsado por un motor diésel de 1.200 CV y su velocidad máxima en carretera es 60 km/h., con 500km. de autonomía.

Para la lucha en zonas urbanas, el Namer tiene la ventaja de su grueso blindaje. Israel había añadido blindaje a su actual suministro de APCs M113 debido a esta amenaza. Según las pruebas realizadas y la primera experiencia en Gaza, las tropas prefieren el Namer, principalmente porque es más resistente a las minas anti-vehículo y a las bombas de carretera y, en general, más seguro para la infantería que va dentro.

El habitáculo del Namer también está equipado con una camilla que permite transportar un herido junto con una carga completa de pasajeros y tripulación. Cuenta con el sistema de gestión de batalla Merkava, así como con cuatro cámaras que proporcionan una visión de 360 grados alrededor del vehículo. La ametralladora controlada a distancia tiene una mira de visión nocturna. El vehículo también cuenta con un aseo, una adición basada en los comentarios de las tropas y en muchas misiones en las que tuvieron que permanecer a bordo hasta 24 horas seguidas en zonas de combate. El coste del Namer es de unos 3 M&. El T-15 debe costar más porque tiene un chasis nuevo construido para la tarea.

Israel tiene más de 500 Merkava II que pueden ser retirados. Si se elimina la torreta y se añade más blindaje en la parte inferior, se obtiene un Namer de 60 toneladas, el IFV más pesado jamás construido. Aunque tuvo éxito en el combate, Israel se dio cuenta de que era un vehículo especializado y que los IFV existentes, basados en el M113 APC estadounidense, eran adecuados, especialmente cuando estaban equipados con los ADS (sistemas de defensa activa) Trophy, que también equipan a los tanques israelíes para protegerse contra los RPG (granadas perforantes propulsadas por cohetes) y los ATGM (misiles guiados antitanque). Los tanques rusos, incluidos los vehículos Armata, también integran ADS, de los que Rusia fue pionera pero que los israelíes perfeccionaron.

Los zapadores israelíes también consiguieron algunos Namers para utilizarlos como CEV (Combat Engineering Vehicles). Estos vehículos existen desde la Segunda Guerra Mundial y suelen basarse en un tanque al que se le ha quitado la torre.

El coste está impidiendo que el Ejército ruso obtenga más que un número simbólico de vehículos Armata. En 2019 recibió doce tanques T-14 y cuatro vehículos de recuperación BREM para el T-14. Estos fueron los primeros modelos de producción.

Había dudas de que estos vehículos aparecieran, dada la pésima situación financiera del fabricante y los informes de problemas técnicos no resueltos de este revolucionario diseño de tanque. Los problemas más graves son los de la electrónica, que es más amplia que en cualquier otro tanque ruso anterior. El tamaño de la tripulación se ha incrementado a tres y ahora hay un aseo en la cápsula de la tripulación. Como la tripulación está confinada en la cápsula blindada, tiene una visibilidad limitada, incluso si alguien saca la cabeza por una de las dos escotillas de entrada. La visibilidad depende normalmente de las cámaras instaladas en el exterior del tanque y de la fiabilidad de la fuente de alimentación y la electrónica que mantiene esas cámaras operativas.

A pesar de todo esto, el fabricante debía entregar unos 40 T-14 antes de 2021. Este lento calendario de producción dio tiempo a los desarrolladores para resolver muchos de los problemas técnicos y de diseño que quedaban. Al parecer, eso permitió fabricar prototipos de IFV T-15, cuyos vídeos mostraron que actuaban tan bien como el T-14.

Rusia está proporcionando contratos de producción como éste, así como más préstamos, para evitar que el fabricante quiebre. Kurganmashzavod, la firma que desarrolló el nuevo tanque T-14 y el IFV T-15, está en quiebra efectiva desde 2016. Kurganmashzavod se mantiene en el negocio porque forma parte de una firma mucho más grande, CTP (Concern Tractor Plants) que, como su nombre indica, es el mayor fabricante de equipos agrícolas de Rusia. Kurganmashzavod comenzó como fabricante estatal de grúas industriales en 1950 y más tarde empezó a producir tractores militares (para el transporte de artillería y otros) y comerciales. En la década de 1960, Kurganmashzavod se convirtió en el principal fabricante del IFV BMP. La empresa desarrolló con éxito varias versiones del BMP hasta la década de 1980. El gobierno sigue comprando vehículos BMP y anfibios BMD principalmente para mantener empleados a los trabajadores clave de la producción.

Rusia ha aprendido por las malas que una vez que muchos de estos trabajadores cualificados se quedan sin trabajo, aprovechan sus habilidades para encontrar nuevas carreras o incluso emigran, y es prácticamente imposible recuperarlos después. Los pedidos de vehículos innecesarios o que no están preparados son un esfuerzo por mantener la mano de obra que, una vez perdida, es extremadamente difícil de reconstruir y requiere mucho tiempo.

Kurganmashzavod, al igual que muchos fabricantes de equipos de defensa de alta tecnología (vehículos, aviones, barcos, misiles y electrónica), tuvo dificultades para mantenerse en el negocio y retener su mano de obra cualificada desde la década de 1990. Cuando la Guerra Fría terminó en 1991, también lo hicieron los pedidos de BMPs. No obstante, la empresa se las arregló con contratos para renovar los BMP y fabricar nuevos componentes (como las torretas), así como algunos vehículos comerciales.

En 2014, la economía rusa y el presupuesto de defensa sufrieron un duro golpe por la bajada de los precios del petróleo y las sanciones occidentales derivadas de la invasión de Ucrania. La situación se volvió desesperada para Kurganmashzavod, ya que sobrevivía a base de préstamos porque los ingresos por la renovación de los BMP habían desaparecido en gran medida, al igual que los pedidos militares en general, por lo que apostó por desarrollar y comercializar los revolucionarios vehículos T-14 y T-15. Los dirigentes rusos quedaron impresionados, pero no había dinero para hacer grandes pedidos y tampoco había clientes para la exportación.

El gobierno alentó el trabajo en el T-14 porque era un artículo de prestigio que demostraba que Rusia seguía siendo un importante desarrollador y fabricante de defensa. Eso no era cierto, pero el gobierno estaba dispuesto a reunir el dinero para hacerlo parecer.

Esa actitud está siendo explotada por Rusia debido a la gran reducción de los presupuestos de adquisición después de la Guerra Fría. Por ejemplo, a principios de 2021 Rusia anunció que el Ejército recibiría más de 400 carros de combate y IFVs mejorados en el siguiente año, pero ninguno será el nuevo tanque T-14 Armata y el IFV T-15 Armata.

Los tanques actualizados, como el T-80BVM, están llenando el vacío de los T-14 que faltan. El Armata es un diseño radicalmente nuevo pero es demasiado caro, teniendo en cuenta los presupuestos de defensa disponibles. Esto se debe a un desplome de los precios del petróleo en 2013 que no se recuperó, mientras que la invasión de Ucrania en 2014 dio lugar a muchas sanciones económicas y comerciales. Desde entonces, el programa ruso de sustitución de equipos antiguos de la era de la Guerra Fría ha tenido que conformarse con más material reconstruido que nuevo. Rusia tiene previsto empezar a construir más T-14 en 2022 o quizá a finales de 2021, a menos que los presupuestos de adquisiciones sufran más recortes debido al mal estado de la economía.

La mayoría de los «nuevos» tanques que el Ejército ruso ha recibido desde el año 2000 han sido T-72B3 renovados y muy mejorados. Actualmente, el ejército ruso tiene unos 3.000 tanques en servicio y la mayoría (el 65%) son de este modelo, de los que se oye hablar poco. Las tropas rusas prefieren el T-72B3M sobre el T-80 y el T-90 y pocos tienen experiencia personal con el T-14.

Desde 2013 el ejército recibe una versión actualizada del antiguo vehículo blindado de transporte de personal sobre ruedas BTR-80, el BTR-82A de 8×8. Mientras que Estados Unidos abandonó los vehículos blindados de ruedas tras la Segunda Guerra Mundial, Rusia mantuvo los suyos y mejoró constantemente su serie BTR. El BTR-80 apareció al final de la Guerra Fría (en 1986). Aunque no son tan pesados o de tan alta tecnología como el Stryker estadounidense, son populares en muchos países, especialmente para su uso por parte de las fuerzas policiales y paramilitares. El actual modelo de exportación del BTR-80 es el BTR-90.

El BTR-82A, de 15 toneladas, está armado con un cañón automático estabilizado de 30 mm en una torreta, lo que le permite disparar con precisión mientras el vehículo está en movimiento. También dispone de una ametralladora de 7,62mm. El BTR-82A cuenta con un sistema de supresión de incendios y un suelo construido para proteger mejor a los tres tripulantes y a los siete pasajeros de las minas y las bombas de carretera. El casco incorpora una capa de Kevlar para proporcionar mayor protección contra los fragmentos de proyectiles y bombas. El BTR-82A tiene un motor y una electrónica mejorados y es anfibio.

Luego están los IFVs de oruga más antiguos. A mediados de 2017, Rusia encargó 540 IFV BMP-2 y BMD-2 mejorados como parte de su programa de modernización militar 2018-2025. La actualización de la flota actual de BMP y BMD llevará tiempo, ya que 540 vehículos son una pequeña parte de los 4.000 IFV BMP-2 y BMD-2 en servicio y que forman parte de la modernización.

Las actualizaciones de los BMP consisten principalmente en la mejora de la potencia y control del fuego, mientras que otras áreas como el blindaje y la movilidad permanecen relativamente sin cambios. El BMP-2 de 14,6 toneladas y el BMD-2 de 11,5 toneladas fueron diseñados en la década de 1980 como actualizaciones o sucesores del BMP-1 original de la década de 1960.

El BMP-2 necesita importantes mejoras mecánicas y de motor para soportar otros aumentos de peso. Por eso el BMP-2M pesa unas 15 toneladas y tiene básicamente una nueva torreta y un sistema de control de fuego y está destinado a las fuerzas aerotransportadas, pero por lo demás es similar a los BMP.

Las entregas del BMD se completaron pronto, pero el BMP-2M actualizado tardará mucho más. El IFV BMP-3M cuenta con la nueva torreta Berezhok, equipada con cuatro misiles antitanque Kornet (guiados por láser) listos para ser lanzados en dos lanzadores gemelos a cada lado de la torreta. El alcance del Kornet es de 5.500 metros y es mucho más fácil de emplear que los antiguos ATGMs de un solo tubo Fagot o Konkurs anteriores.

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