AUKUS, la nueva alianza de defensa tripartita de Estados Unidos con Reino Unido y Australia, así como la cooperación en materia de submarinos de propulsión nuclear que la seguirá, no hará sino aumentar la inestabilidad de la región. Desde su anuncio a mediados de septiembre, varios países se han unido a China para expresar sus reservas sobre ella.
El día 5 de octubre, los ministros de Asuntos Exteriores de Malasia e Indonesia se sumaron a otros que expresaron su alarma por la ambición de Australia de construir submarinos de propulsión nuclear en el marco de la AUKUS, así como por los riesgos de la creciente competitividad geopolítica de la región.
En efecto, con Estados Unidos reactivando viejas y nuevas alianzas en Asia-Pacífico y militarizando la zona en un intento de contener y aislar a China, la región corre el riesgo de convertirse en un barril de pólvora a punto de estallar.
Durante décadas, las naciones del sudeste asiático han mantenido relaciones sólidas y mutuamente beneficiosas con China, y el brote de COVID-19 ha reforzado aún más esta relación. El año pasado, la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN, compuesta por Indonesia, Malasia, Filipinas, Singapur, Tailandia, Brunei, Laos, Myanmar, Camboya y Vietnam) superó a Estados Unidos como principal socio comercial de China.
En esta situación, las naciones miembros de la ASEAN deben tener en cuenta que AUKUS trae regalos falsos, aunque Australia dijo que continuará su compromiso con la centralidad y con el mecanismo que dirige esta organización. Pero, a la vista del reciente comportamiento de Estados Unidos, los miembros de la ASEAN deberían esperar propuestas de AUKUS a nivel nacional dirigidas a fracturar la cohesión del bloque, ya que la ASEAN ha dudado en ponerse del lado de Estados Unidos en su batalla geopolítica con China. Es probable que en la cumbre del bloque que se celebrará a finales de este mes se discuta cómo debe responder la ASEAN a la AUKUS.
Sería útil para la zona y más allá si la ASEAN pudiera establecer un cortafuegos de voluntad común para proteger la paz y la estabilidad regional, impidiendo que AUKUS se abra paso en cualquier resquicio de la unanimidad del bloque y lo desgarre.
En efecto, AUKUS se ha convertido en un gran dilema para la ASEAN, especialmente para las normas y principios de ésta, que debe tener cuidado de replantearse mientras mantiene la ASEAN Way. Estas son las razones de su silencio tras el acuerdo AUKUS, que constituye un nuevo reto para la centralidad de la ASEAN, por lo que los observadores siguen esperando ver cómo responde ésta. La forma en que la ASEAN vea a la AUKUS determinará no sólo el futuro de la región del Sudeste Asiático, sino también el de la región Indo-Pacífica.
Por otra parte, un importante incidente en la región en el que se ha visto involucrado un submarino estadounidense debería iluminar a aquellos que todavía están perplejos sobre el impacto negativo que AUKUS puede tener en la seguridad regional. El USS Connecticut, un submarino de propulsión nuclear, colisionó con un objeto submarino en el Mar de China Meridional el 2 de octubre.
Hasta ahora, Estados Unidos se ha negado a ofrecer más información sobre el incidente, y mucho menos a explicar qué hacía el submarino en la zona o si el percance provocó una fuga radiactiva que dañó la ecología marina local. Como resultado de esta imprudencia, la ASEAN debería reconsiderar la conveniencia de tener más submarinos de propulsión nuclear en la región en el futuro, y extrapolar los riesgos que plantea la táctica de Estados Unidos en su «carrera» con China.
Nos enfrentamos a dos vertientes al ver los cambios en la construcción de realidades dinámicas en la región Indo-Pacífica debido al acuerdo AUKUS. En primer lugar, la ASEAN debe replantearse sus normas y principios frente a los sistemas de anarquía. En segundo lugar, hay que reconocer que el equilibrio de poder que glorifica el neorrealismo ha vuelto a fracasar a la hora de explicar cómo el equilibrio de poder es capaz de mantener la seguridad y la paz internacionales.
Así, si varios países responden a la alianza de defensa AUKUS como una vieja forma de la guerra fría, el papel de la ASEAN en el mantenimiento de la centralidad, así como la perspectiva de la ASEAN en el Indo-Pacífico es muy importante y necesita ser reconocido.
La arquitectura de cooperación regional centrada en la ASEAN ha demostrado tener éxito en el apoyo a la paz y la prosperidad regionales a través de sus Confidence Building Measures (CBMs). Especialmente en este caso, los países miembros de la ASEAN deben considerar sus compromisos con la Southeast Asia Nuclear Weapon Free Zone (SEANWFZ) y la Zone of Peace, Freedom, and Neutrality (ZOPFAN). Es algo que todos los miembros de la ASEAN deberían valorar y defender. Por no hablar del hecho de que redunda en su propio interés. Sin embargo, los desafíos pueden provenir de problemas internos, los países miembros de la ASEAN deben ser capaces de armonizar los intereses estatales y los intereses comunes.
Fte. Modern Diplomacy (Raihan Ronodipuro)
Raihan Ronodipuro tiene una beca del MOFCOM chino y obtuvo un máster en Relaciones Internacionales en la Escuela de Asuntos Internacionales y Públicos de la Universidad de Jilin (China). Es un analista de investigación independiente especializado en las relaciones sino-indonesias y en temas de Asia-Pacífico.