Israel firma un acuerdo con Elbit para la «artillería del futuro»

Israel ha firmado un acuerdo que ampliará sus planes para desplegar la «artillería del futuro», anunció el Ministerio de Defensa.

El Ejército ha firmado un acuerdo con Elbit Systems para el desarrollo y la adquisición de «sistemas avanzados de artillería que sustituyan a los ya existentes. Este proyecto podría resolver los desafíos operacionales que el país enfrenta en el norte, potencialmente en Siria, Líbano y Gaza. También representa un compromiso de invertir en sus fuerzas terrestres en futuros conflictos.

«Este es uno de los planes de adquisiciones más grandes y complejos en la historia de las Fuerzas Terrestres», agregó el Ministerio, cuyo despliegue se espera para la próxima década.

Israel ha llevado a cabo pruebas iniciales de la tecnología y ha identificado desafíos de ingeniería. «La siguiente etapa de desarrollo ha comenzado: la producción de prototipos y los preparativos para la producción en serie», señaló el ministerio.

Según un alto funcionario jubilado con conocimientos de esta tecnología, la decisión no es poca cosa. Después de la Segunda Guerra del Líbano, dijo, la necesidad de mejorar la artillería de Israel no era una prioridad, pero ahora «por muy grande y fuerte que sea la Fuerza Aérea, las fuerzas terrestres tienen que estar cerca y suponer en tiempo real en condiciones meteorológicas adversas».

El desafío es encontrar un sistema que sea más preciso y eficiente que los obuses M109 de 155 mm, que son la columna vertebral terrestre en estos momentos.

Israel consideraba anteriormente al ATMOS (Autonomous Truck Mounted howitzer System) de Elbit, un obús autopropulsado de 155 mm, para el cañón. También, según el diario local Globes, en 2017 Israel Aerospace Industries, Israel Military Industries y las empresas alemanas Krauss-Maffei Wegmann y Rheinmetall presentaron conjuntamente un sistema al Ministerio de Defensa de Israel para un programa por valor de unos 800 millones de dólares.

KMW y Rheinmetall fabrican el sistema avanzado de artillería Panzerhaubitze 2000 que puede disparar 10 disparos por minuto y ha entrado en acción en Afganistán. Sin embargo, Israel ha mostrado preferencia por los sistemas de producción local.

Las Fuerzas de Defensa Israelíes quieren un cañón con una alta velocidad de tiro y un cañón de 155 mm, calibre 52, capaz de disparar a una distancia de unos 40 kilómetros. Israel experimentó con un sistema llamado Sholef en la década de 1980.

El acuerdo firmado el mes pasado representa el próximo intento de Israel de producir un sistema autóctono, basado en la experiencia del K9 Thunder de Corea del Sur, el sistema de artillería Archer de Suecia y el XM2001 Crusader de fabricación estadounidense, que nunca estuvo operativo.

El oficial retirado describió la «artillería del futuro» como un sistema de tercera generación, totalmente automatizado, que incorpora la última tecnología en mando, control, comunicaciones, ordenadores e inteligencia.

El sistema avanzado será capaz de cargar y colocar automáticamente», dijo el Ministerio en su anuncio. «El sistema selecciona automáticamente, dependiendo de la misión, el tipo de proyectil y espoleta, cargando automáticamente.» En otras palabras, dicha capacidad reduce el número de soldados necesarios para operar el sistema.

También añadió que sería único, al tener un sistema automatizado avanzado sin soldados en la torre del vehículo.

La Artillería de Israel ya hace uso de la tecnología más reciente, combinando cañones con misiles, cohetes y vehículos aéreos no tripulados, y sacando lecciones aprendidas de la Guerra de Gaza de 2014, como la necesidad de precisión en el combate urbano. Esa tecnología incluye sistemas como el Top Gun del IAI, el misil Tammuz y el sistema de cohetes de lanzamiento múltiple guiado.

Fte. DefenseNews