Los tres USV (Vehículos de Superficie No Tripulados) de la fuerza naval ucraniana operativos, también conocidos como drones, son Sea Baby (Malyuk en ucraniano), Mother (Mamai) y MAGURA, que significa Maritime Autonomous Guard Unmanned Robotic Apparatus (Aparato Robótico No Tripulado de la Guardia Marítima Autónoma).
Sea Baby y Mother fueron desarrollados por el SBU (servicio secreto ucraniano) y la Fuerza Naval Ucraniana. Los emplea la 385th Separate Brigade, especializada en guerra naval. MAGURA fue desarrollado por GUR (traducido como, proyecto de la «Main Intelligence Directorate») y SpetsTechnoExport, una empresa estatal. A finales de 2023, SBU presentó un Cossack Mamai actualizado con 100 km/h de velocidad máxima. La fabricación de estos drones se realiza en instalaciones de producción subterráneas para evitar los ataques rusos con misiles y bombas guiadas.
Malyuk se empleó en el ataque al puente de Kerch a mediados de 2023, transportaba 850 kg de explosivos para infligir daños considerables. MAGURA transporta 320 kg de explosivos mientras que Mamai transporta 450 kg. Estos USV ya no se destinan únicamente a lanzar explosivos contra un objetivo, sino que también pueden emplearse para reconocimiento cuando están equipados con cámaras de vídeo que transmiten lo que ven al operador del USV. Algunos USV han sido armados con pequeños lanzacohetes. Los Malyuk tienen más de 700 kilómetros de alcance, lo que significa que son adecuados para operaciones en alta mar. Su autonomía es de unas 60 horas, y su velocidad máxima supera los 70 kilómetros por hora. El MAGURA tiene características similares. Mamai se empleó en el ataque de largo alcance a la lejana base naval de Novorossiysk, en el este del Mar Negro ruso, que está a mil kilómetros de Crimea.
Ucrania viene desarrollando USV submarinos y a principios de 2023 se presentó el primero, el Toloka2 TK-150. Este USV medía 2,5 metros de largo y estaba dotado de un mástil sensor que permanecía sobre la superficie para navegar e identificar objetivos. El Toloka2 también puede llevar una pequeña ojiva explosiva. Más recientemente, Ucrania desarrolló el USV Marichka, más grande, de 6 metros de longitud y un metro de diámetro. Ucrania ha previsto que un fabricante occidental construya y arme los USV ucranianos.
Los USV ucranianos han tenido bastante éxito atacando y hundiendo o inutilizando barcos de la Armada rusa. Hasta ahora se han producido doce ataques que han provocado daños en 12 barcos y el hundimiento de un crucero, dos pequeños buques de desembarco y una corbeta de misiles. Las incursiones de mayor alcance han sido contra objetivos en el estrecho de Kerch y la base naval más distante de Novorossiysk.
Para poner en perspectiva los ataques de los USV, he aquí una lista de las pérdidas de buques rusos en el Mar Negro desde que los rusos invadieron Ucrania en febrero de 2022:
Marzo de 2022
Ucrania empleó misiles antitanque y vehículos aéreos no tripulados armados para destruir tres patrulleras e infligir graves daños a dos. Más tarde, en marzo, atacó una base naval rusa, hundiendo un buque de desembarco y dañando otros barcos que salir de la base. Uno de estos barcos estaba ardiendo y Rusia acabó por hundirlo para evitar que explotaran las municiones que llevaba a bordo. Más tarde, Rusia elevó ese barco, hizo reparaciones provisionales en el casco y lo remolcó hasta un lugar donde pudieran repararse los daños.
Una corbeta rusa resultó dañada y remolcada para ser reparada.
Abril de 2022
Un crucero ruso, el Moskva, resultó dañado y acabó hundiéndose tras ser alcanzado por misiles antibuque ucranianos con base en tierra. El Moskva era el buque insignia de la Flota del Mar Negro.
Mayo de 2022
Se utilizó un UAV armado para hundir una lancha de asalto rusa. Una lancha de desembarco rusa cercana fue hundida por un UAV armado.
Junio de 2022
Una corbeta rusa dañada fue remolcada para ser reparada en una base rusa. Ucrania utilizó dos misiles antibuque para hundir un remolcador de rescate ruso.
Octubre de 2022
Ucrania atacó y dañó con vehículos aéreos no tripulados un dragaminas ruso.
Mayo de 2023
Los USV ucranianos destruyeron un buque ruso de inteligencia.
Agosto de 2023
Los USV ucranianos atacaron y dañaron un buque de desembarco ruso cerca de la base naval rusa de Novorossiysk, en el este del Mar Negro. A causa de ello, Rusia dejó de usar Novorossiysk aunque estaba a casi mil kilómetros al este de Crimea. Los USV ucranianos que operaban tan al este convencieron a Rusia de que ya no era segura la base. Los barcos rusos se dispersaron hacia puertos aún más lejanos del Mar Negro.
Septiembre de 2023
Aviones de guerra ucranianos atacaron con bombas guiadas británicas de largo alcance la base naval de Crimea en Sebastopol. Un buque de desembarco ruso fue hundido y un submarino en dique seco sufrió daños irreparables.
Noviembre de 2023
Ucrania atacó con misiles de crucero un astillero ruso en Crimea y dañó una corbeta rusa tan gravemente que quedó irreparable.
Diciembre de 2023
Ucrania empleó misiles de crucero lanzados desde el aire para destruir un gran buque de desembarco ruso atracado en un puerto de Crimea. Poco después, en diciembre, los USV ucranianos y los ataques aéreos hundieron una patrullera rusa.
Febrero de 2024
Los USV ucranianos atacaron y hundieron una corbeta rusa con base en Crimea. Ese mismo mes, Ucrania empleó USVs para atacar un buque de desembarco ruso frente a la costa de Crimea.
Las operaciones de los USV ucranianos en el Mar Negro obligaron a la Flota rusa del Mar Negro a retirarse a la costa oriental. Sebastopol ya no era un lugar seguro, y los barcos rusos ya no podían lanzar sus misiles de crucero Kalibr sin arriesgarse a ser atacados por los USV ucranianos. La presencia y el uso agresivo de los USV significa que el corredor de cereales de Ucrania se ha mantenido abierto a pesar de las amenazas rusas de interferir. Más allá de su significado simbólico, el corredor tiene para Ucrania importancia económica crítica y se espera que contribuya entre un 5% y un 7% al crecimiento del PIB en 2024 gracias a los envíos de grano.
El uso agresivo y exitoso de los USV ucranianos contra la Flota rusa del Mar Negro no tiene precedentes en la historia de la guerra naval. Estos USV no sólo tuvieron éxito táctico, sino también económico. Por ejemplo, las nuevas fragatas cuestan unos 1.500 millones de dólares cada una. Con esa cantidad de dinero también se pueden pagar 5.000 USV de este tipo. Los destructores cuestan el doble. Las fragatas y los destructores son buques de alta mar y pueden navegar por todo el mundo. Los USV operan en aguas costeras, aunque algunos de los más grandes pueden hacerlo hasta a mil kilómetros de donde fueron lanzados. Estos USV llevan cámaras de vídeo y sistemas de comunicación por satélite para recoger información y, en tiempos de paz, lo hacen sin temor a ser atacados. Las tormentas severas son otra cosa, pero cualquier daño causado por una tormenta se retransmitirá mientras está ocurriendo, al menos hasta que se inutilicen las cámaras de vídeo o el equipo de comunicaciones.
Los cargueros comerciales pueden transportar cientos de vehículos aéreos no tripulados armados y equipados con comunicaciones por satélite para que los operadores de cualquier parte del mundo puedan controlarlos. Estos USV pueden descargarse en el mar y enviarse a realizar ataques contra objetivos de la zona o trasladarse a un puerto cercano y permanecer amarrados a un muelle hasta que se necesiten. El único mantenimiento consiste en mantener cargadas las baterías. Estos USV son una nueva arma radical para la guerra naval y la guerra en el mar nunca volverá a ser la misma gracias al éxito de los USV ucranianos en su victoriosa guerra contra la Flota rusa del Mar Negro.
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