El F-35 suele considerarse un caza de 5ª generación rápido y sigiloso, capaz de eludir y destruir las defensas aéreas enemigas. Sin embargo, también tiene la capacidad de bombardear en lo conocido como «beast mode» para realizar ataques de mayor envergadura.
La disminución de las propiedades de sigilo no hace que el F-35 sea ineficaz en diversos aspectos, dado que está diseñado tanto para bombardeos pesados como para misiones de reconocimiento.
Ataque aéreo furtivo: Qué armas del F-35 permiten el «beast mode» masivo
Si se consideran conjuntamente, un F-35 podría emplear sus cámaras electro/óptico-infrarrojas (EO-IR) y los sensores circundantes para encontrar objetivos terrestres lejanos de forma autónoma, y luego atacarlos desde el aire.
El avión dispone de una bodega de armas interna, pensada para permitir ataques conservando la configuración sigilosa, pero un ataque con todas sus fuerzas significará el uso de los pilones externos para activar lo que muchos llaman su «beast mode».
Un interesante informe del Aviation Geek Club describe el modo bestia como un F-35 armado con «seis bombas inertes GBU-12 guiadas por láser de 500 libras, cuatro cargadas externamente en las alas y dos internamente en el compartimento de armas, así como un misil aire-aire de entrenamiento AIM-9».
Naturalmente, esto significa que un F-35 aumentaría su firma de radar y disminuiría la eficacia de sus propiedades furtivas, sin embargo, tal configuración sería posible en entornos de combate en los que ya se ha conseguido la superioridad aérea.
Las GBU-12 guiadas por láser, una unidad de bomba guiada, pueden localizar objetivos terrestres «iluminados» por designadores láser desde el aire o el suelo, lo que permite realizar ataques de precisión.
La GBU-54 también una bomba guiada por láser y que también aporta la capacidad de que un avión alcance objetivos móviles en tierra.
Esto supondría un enorme aumento de la eficacia, ya que la aeronave podría responder a la nueva información de inteligencia en tiempo real, reduciendo así enormemente la latencia y el tiempo entre el sensor y el tirador.
Por extensión, la a menudo discutida «fusión de sensores» del F-35 podría desempeñar un papel aquí, ya que se basa en la automatización informática y la IA para recopilar información de sensores que de otro modo estarían separados, analizarla y organizarla para proporcionar a los pilotos una única imagen integrada.
Las métricas de navegación, puntería y electrónica se pueden fusionar en la propia aeronave.
Fte. Warrior Maven
Kris Osborn es editor de asuntos militares de 19FortyFive y presidente de Warrior Maven – Center for Military Modernization. Anteriormente, Osborn trabajó en el Pentágono como Experto Altamente Cualificado en la Oficina del Subsecretario del Ejército-Adquisición, Logística y Tecnología.