Carros de combate transparentes

Hensoldt, experto en sensores, ha presentado recientemente su Local Situational Awareness System (LSAS) para vehículos blindados. Está diseñado para evitar las debilidades en la visión del entorno causadas por la coraza, proporcionando un conjunto óptico, que permite la plena conciencia del entorno. Elliot Gardner habló con Hensoldt para saber más sobre el “tanque transparente”.

Se ha dicho que uno de los lugares más seguros para estar durante una batalla es dentro de un tanque. A medida que se han eliminado los defectos de los primeros diseños del blindaje, los carros de combate y otros vehículos blindados se han convertido en una herramienta increíblemente eficaz en el campo de batalla, resistente a todas las municiones, excepto a las más especializadas contracarro.

Aun así, esa ventaja, es decir estar encapsulado en pulgadas de blindaje impenetrable, puede ser un obstáculo significativo para las tripulaciones. Como cualquier alteración en el blindaje supone una grave debilidad estructural que puede ser aprovechada, las escotillas de visión y los periscopios deben reducirse a un mínimo absoluto, lo que dificulta la navegación la visibilidad y por tanto, el conocimiento del entorno. Los sistemas de sensores y cámaras se han desarrollado rápidamente en los últimos años, pero para muchas tripulaciones de tanques, abrir la escotilla y mirar hacia el exterior sigue siendo la forma más efectiva, aunque más comprometedora, de navegar adecuadamente por el terreno.

En un intento por abordar esta vulnerabilidad, Hensoldt presentó recientemente el Sistema Local de Conciencia Situacional (Local Situational Awareness System, LSAS), una red de cámaras de alta resolución, que observan toda el área alrededor de un vehículo blindado, proporcionando al usuario tanta información como si llevara la cabeza fuera de la escotilla, mientras permanece encerrado de forma segura dentro del vehículo.

Hensoldt llama al sistema «tanque transparente», ya que la resolución de las cámaras externas está a la par con la del ojo humano, proporcionando a la tripulación la misma visión que si las paredes del vehículo fueran transparentes.

«El campo de batalla ha cambiado en las últimas décadas», afirma Hensoldt, director de proyectos de LSAS Marc Krause. «Actualmente hablamos del «cañón urbano» como campo de batalla. Las amenazas pueden aparecer de casi todos los lados o ángulos. Ser consciente de la situación en la que se encuentran es crucial para la supervivencia. El LSAS da a la tripulación la ventaja de permanecer segura en el vehículo, obteniendo la conciencia y orientación necesarias de la situación alrededor del vehículo con la misma resolución que el ojo humano».

La confianza en una tecnología tan avanzada trae consigo ventajas inherentes. Cada módulo sensor está equipado con una cámara de luz diurna de alta resolución, pero también incluye dos módulos de imagen térmica no refrigerados. Esto significa que incluso en entornos con poca luz o poca visibilidad, las tripulaciones pueden orientarse para combatir amenazas localizadas. Hensoldt afirma que los usuarios pueden reconocer a una persona a una distancia de hasta 300 metros, incluso de noche.

El sistema funciona mejor cuando se integra directamente en la arquitectura del vehículo, como en el sistema de gestión de batalla (BMS). «Con este nivel de integración, el LSAS no sólo puede proporcionar imágenes en directo desde el exterior a todo el mundo conectado, sino que también puede utilizar los datos proporcionados por la arquitectura del vehículo y especialmente por el BMS para mostrarlos a los miembros de la tripulación utilizando la interfaz hombre-máquina (HMI) del LSAS», explica Krause.

El sistema también puede utilizarse de forma autónoma mediante la instalación de módulos en el exterior de cualquier vehículo blindado. Este diseño modular permite un cierto grado de personalización, con sensores adicionales, como una cámara hemisférica, que permite un campo de visión vertical, y detección acústica de francotiradores.

Hubo importantes dificultades que superar en el desarrollo del LSAS. Aunque Hensoldt disponía fácilmente de cámaras de alto rendimiento, el procesamiento a bordo de una cantidad tan grande de datos a alta resolución fue muy difícil. El ojo humano es mucho más eficiente en el procesamiento de imágenes que la tecnología de las cámaras, por lo que las cámaras que buscan replicar imágenes con tanto detalle generan cantidades extremadamente grandes de datos.

También está la cuestión de la operación del sistema. El desarrollo de una HMI eficaz para LSAS está muy bien, pero cada miembro de la tripulación del vehículo ya tiene una tarea vital que hacer, por lo que cualquier tecnología adicional tiene que estar lo más integrada posible para no crearles trabajos adicionales. Las pantallas montadas en cascos (HMD) son una solución potencial, similar a IronVision HMD de Elbit Systems, que también permite a las tripulaciones a bordo superar las limitaciones de visibilidad del combate blindado.

También está la cuestión de la seguridad contra las amenazas físicas y cibernéticas. Hensoldt afirma que, a pesar de ser un sistema electrónico, la naturaleza integrada en el vehículo de LSAS significa que las únicas amenazas cibernéticas a las que se enfrenta son las que comparte la arquitectura general del vehículo. Sin embargo, las amenazas físicas siguen siendo un problema.

«Como todos los sensores ópticos, el LSAS puede sufrir daños físicos. Por lo tanto, estamos trabajando junto con los fabricantes de vehículos para integrar el módulo sensor lo mejor posible en la estructura y blindaje del vehículo para reducir la posibilidad de daños físicos», dice Krause. Ello podría dificultar la utilización de esa tecnología, ya que, por naturaleza, es probable que los vehículos blindados sean objeto de ataques con artefactos explosivos de gran potencia que podrían inutilizar la tecnología de los sensores. El LSAS se demostró en la feria Eurosatory de este año en París, y según Hensoldt, el principal desarrollo de producto está en marcha, con prototipos en funcionamiento previstos para finales de 2019.

Fte. Army Technology